7 de agosto de 2011

El peor día ever

Bricia:

Mis mensajes no los respondes, no me llamas y no se si mis mails los vayas a abrir, mucho menos creo que entres aquí, ya no se por dónde pero por si remotamente llegarás a dar con este lugar...

El primer día después de que me dijiste que ya no funcionamos como pareja y que tomaste la decisión de seguir el uno sin el otro, ha sido el día más complicado a mis mediocres veinte años. Todo el día estuve solo, encerrado, sin comer y sin hacer nada más que pensar en ti. Sé que yo he tenido la eterna culpa y que tú tienes toda la razón en la decisión que has tomado. No sabes la culpa y el arrepentimiento por el que estoy siendo sometido en estos momentos.

Sin embargo, tal y como me dijiste, he aprendido muchísimas cosas de ti, una, a ser más abierto con la gente. Hoy, de forma inverosímil me acerque a dos personas, dos personas que sabía estaban ahí empero no había depositado la confianza debida en ellos. Lo logré, y parte de ello fue gracias a ti, me sirvió pero lo lamentable es que YA ES DEMASIADO TARDE. Me han abierto los ojos, y veo todo de una manera muy distinta a la que solía verlo.

Me dijeron bastantes palabras que tú me solías decir cuando discutíamos o cuando teníamos problemas, viniendo de ellos se perciben diferente. Veo todo distinto, que bueno, pero me da miedo que sea muy tarde.

Tú sabes lo que quisiera y que mi esperanza no muere, sigue de pie. Es lo más difícil que me ha pasado hasta el día de hoy, mañana quizá me ría pero hoy duele y duele en lo más profundo.

Nadie me asegura que volverás y nadie me asegura que es definitivo, los padres siempre dan falsas esperanzas ¿no es así?. Yo, por mi parte veré hacia adelante y positivamente esperando a que algo bonito pase de nuevo.

Yo no sé si tu sabes (cómo dice la canción) pero te amo.

Infinitamente tuyo, Javier.


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